Capotreno

Esta debe ser una de las mejores palabras que escuché ultimamente, capotreno, no me canso de repetirla.

El tren, il treno, der Zug, me llevó de Verona a la cuna del Kitsch, mi casa, Monaco di Baviera, München, Múnich. Y qué mejor lectura para ese trayecto que la deconstruccion del mal gusto, por el mismísimo Eco.

Apocalípticos e integrados es uno de esos libros indispensables, de esos que no tengo idea de porqué demoré tanto en manotiar.

Como notarán, el abra sigue mutando, la cosa viene de posts más espaciados, y menos links, así será por ahora, sepanlón.

Aber, sigan atentos al flog.

a vida vem em ondas

avanza el tsunami 2006-2007 (ahora que vivo en el norte mis años, que se siguen midiendo en veranos, parten el calendario por la mitad), la muerte juega sus fichas, hace amagues y gana algunas batallas, mientras que nosotros impasibles seguimos ensayando jugadas, aprendiendo o intentándolo en la única partida que tenemos.

a pesar de lo abrumador de la ola sísmica, montones de otras fuerzas mucho más sutiles, generan ondas y contraondas, rizando la superficie, entreteniéndonos, yendo ellas también al mismo final.

qué divertido es el surf