Javier:
es terrible, pero la gente que inicia estas campañas de desprestigio,
amparadas en el anonimato, siguen haciendo de las suyas.
Hay que seguir denunciándolos, desde sitios como éste.
Que La Ley siga tocando… eso sí, lejos de acá.
Más vale, que sigan deleitando con su exquisito pop-rock a los chilenos, que se lo tienen bien merecido.
Che, Javier, ¿tenés muchos lectores en Chile?
Porque están entrando al post con el cuchillo
entre los dientes.
Propongo hacerlos encontrar con los rollingas
de la campaña anterior y que se eliminen entre
ellos…
Está claro que al perder el sentido del oído,
uno pierde el sentido del humor.
En lo que va del mes, tengo unas 30 visitas certificadamente chilenas, pero pueden haber más.
Una gresca entre groupies de La Ley y unos cuantos rollingas puede ser algo épico :)
Acá no pasa un fin de semana donde no caiga algún comentario pro-stones.
Me niego a poner un cartelito «Sarcasmo» antes de cada post.
Recordando a un grande como fue Andy Kaufman, creo que uno
no tendría que explicar los chistes. Pero bueno, cuando lleguen
las primeras amenazas de muerte lo reveo.
Javier:
es terrible, pero la gente que inicia estas campañas de desprestigio,
amparadas en el anonimato, siguen haciendo de las suyas.
Hay que seguir denunciándolos, desde sitios como éste.
Que La Ley siga tocando… eso sí, lejos de acá.
Más vale, que sigan deleitando con su exquisito pop-rock a los chilenos, que se lo tienen bien merecido.
Che, Javier, ¿tenés muchos lectores en Chile?
Porque están entrando al post con el cuchillo
entre los dientes.
Propongo hacerlos encontrar con los rollingas
de la campaña anterior y que se eliminen entre
ellos…
Está claro que al perder el sentido del oído,
uno pierde el sentido del humor.
En lo que va del mes, tengo unas 30 visitas certificadamente chilenas, pero pueden haber más.
Una gresca entre groupies de La Ley y unos cuantos rollingas puede ser algo épico :)
Acá no pasa un fin de semana donde no caiga algún comentario pro-stones.
Me niego a poner un cartelito «Sarcasmo» antes de cada post.
Recordando a un grande como fue Andy Kaufman, creo que uno
no tendría que explicar los chistes. Pero bueno, cuando lleguen
las primeras amenazas de muerte lo reveo.